Empecé a obsesionarme en el mismo momento que ví que pasaba de mí y decidí averiguar más cosas de su persona. Poco a poco y cual detective privado fuí entrando en su vida pero muy por encima.
De la manera más tonta descubrí cual era su dirección, la marca de su coche e incluso la matrícula. Casualmente la parada de autobús donde espero todas las mañana para ir al trabajo, está en frente de su portal y al lado de su portal está su coche. Un día le ví salir de su edificio y meterse dentro del vehiculo. Mi corazón empezó a palpitar de una manera desenfrenada porque el destino me había colocado justo en ese lugar para descubrirle a él. No sé como no oyó mis latidos porque iban dirigidos todos a él ... seguro que iría con prisa y no se percató.....
A partir de ese momento e igualito que un adolescente espero el autobus con cierto nerviosismo y con mucha ilusión. Cupido: Reacciona!!!!!
Ut
Dicen que hay que atender a las señales, que nada ocurre por casualidad, que debemos de guiarnos por nuestros instintos... pues ahí lo tienes, el destino te mandó una señal, hizo algo que puede pasar una vez cada mil, y es que él saliese de su portal justo cuando tú esperabas el autobús.
ResponderEliminarQuizá no signifique que es el hombre de tu vida, pero seguro que el destino no quería que te olvidaras de él.
El próximo paso le tienes que dar tú.
Un besazo
parece que cupido te clavó la flecha a ti.
ResponderEliminarhabrá flecha para él también?